03 mayo 2010

Empatizando




Empatía: Identificación mental y afectiva de un sujeto con el estado de ánimo de otro.



¿Por qué nos resulta tan difícil? Quizá porque es molesto tener que entender sentimientos que no son nuestros, situaciones que no nos interesan. O por la pereza absoluta de pararse a escuchar y asimilar que no somos los únicos que tienen mundo interior.



Todo el mundo siente, unos lo exteriorizan, otros no, incluso hay quien lo oculta. Por eso es tan importante la empatía, para poder convivir con el resto del género humano, para entender que alguien tiene un mal día y no tiene ganas de hablar, o que su mundo se derrumba y necesita un apoyo, o que esta viviendo una situación especial y quiere compartir su felicidad con los demás.



Es tan importante conectar con los sentimientos de quienes nos rodean, como poner un pie tras otro para caminar, se trata de una dinámica esencial para poder compartir espacio, vivencias, silencios, risas... y seguir manteniendo una relación sana con nuestro entorno.



Pero ojo, empatizar con lo que otros sienten, no implica asumir su papel en la historia, cada cual debe vivir su vida y dejar que cada cual luche la suya, porque si no dejaríamos a un lado nuestros propios sentimientos para bañarnos en los de los demás y eso tampoco es sano.



Es muy difícil encontrar el equilibrio entre la empatía, compartir, conectar, y mantenerse al margen. Quizá por ese motivo, gran parte de quienes pasan por este planeta, hacen oídos sordos a todo lo que les resulta ajeno, defendiéndose con que no les importa la vida de los demás.



A mi, personalmente, me da igual la vida de los demás, no cotilleo si están felices, ni meto el dedo en heridas, simplemente acompaño, escucho, río, callo... y aguardo cerca para lo bueno y lo malo. Porque me gusta sentir sus sentimientos, sin hacerlos propios.